Conducta Regular
Conducto regular, es la cadena jerárquica por así decirlo para notificar, aprobar acciones o situaciones según su importancia, por ejemplo, un problema en un colegio, el alumno notifica el problema al profesor, el profesor lo notifica a la coordinación correspondiente, y de aquí se lleva a rectora, si es muy grave, en casos menores la solución se encuentra en el maestro o en la coordinación, es como el oren que se le da al manejo de diversas situaciones.
El conducto regular y el debido proceso son dos instrumentos legales establecidos en la legislación colombiana para el tratamiento de las faltas y dificultades que presenten los estudiantes en el ámbito académico y de convivencia.
CONDUCTO REGULAR: Se entiende como Conducto Regular a las diferentes instancias de que disponen los estudiantes para buscarle alternativas de solución a los problemas y/o dificultades académicas y disciplinarias que se les presenten durante el transcurso de sus procesos formativos en el Colegio. Tales instancias son:
PARA CASOS ACADÉMICOS:
- Profesor de la materia.
- Director de grupo.
- Coordinador.
- Consejo académico.
- Rector.
- Consejo Directivo.
PARA CASOS DISCIPLINARIOS:
- Profesor que observa la falta.
- Director de grupo.
- Coordinador.
- Rector.
- Consejo Directivo.
Importancia
El conducto debe ser respetado con el fin que las directrices e instrucciones siempre tengan el mismo canal, ya que este permite que no existan ejecuciones distintas para misma institución y a su vez está sea impartida por diferentes lineas del mundo.
Para que se hace?
Para mantener el orden dentro del lugar en el cual ejercen una actividad.
El Conducto regular no se inventó solo para mandar y diferenciarse jerárquica mente de los demás, se ideó como método eficiente para ganar guerras, con menos bajas posibles; como un principio de orden en la administración; para constituir niveles de responsabilidad; para establecer tareas por competencias; para evaluar cotas de rendimiento, entre otras cosas. Detrás de un soldado en cualquier guerra exitosa hay una férrea cadena de mando y como mínimo tres administrativos, ojalá fueran cinco como en la “tormenta del desierto” -la guerra del Golfo Pérsico- los operativos –hombres de combate- necesitan comunicaciones, alimentación, hidratantes, medicina, armamento, alojamiento, uniformes, combustible, vehículos etc. todo el apertrechamiento necesario y a tiempo para el combate, que termina siendo atendido por más de cinco, pero me refiero a los directamente responsables en proporción de 5 a 1. La mediocridad rompe la línea de mando e invierte este factor, son pandillas de compinches… de perdedores…las milicias de la traición.
El Conducto Regular puede ser lento al principio, pero rápido al final. Siguiéndolo aseguramos resultados con calidad y el cumplimiento del plan. Lo otro es la anarquía, que solo beneficia a los enemigos y a las mediocridades afortunadas que solo van por lo suyo -no lo duden-. Ayudemos y rodeemos a nuestro Alcalde, que lo está necesitando estimados compañeros.
Las mediocridades afortunadas saben bien cuáles son sus debilidades y lo que les hace falta para ser, esa es su ventaja, desarrollan una narizota múrida para oler el miedo, huelen a quienes las tienen –las debilidades-, y rastrean a quienes de manera ingenua están preparados, educados y capacitados para hacer lo que ellos no podrían ni naciendo otra vez, esa es su fuerza. No es fuerza constructiva, no la usan para mejorarse y vencer sus debilidades, la usan para destruir con gran empeño todo aquello que los haga ver como realmente son. Tienen un objetivo preciso, ganarse con un intrincado juego de simulación -como culebreros- el reconocimiento y los premios reservado sólo para los mejores, engañando a un amplio público hambriento y sin oportunidades, sediento de malabares que les distraigan su desesperanza.
